La lámpara de suspensión se compone de dos formas geométricas que contrastan a la vez que se interrelacionan. La capa externa es una estructura rígida de aluminio con forma de icosaedro y 20 caras triangulares. La forma interna, que parece flotar dentro de la estructura, es un reflector de policarbonato blanco con forma de dodecaedro y 12 caras pentagonales.